jueves, 11 de octubre de 2012

OTRO ENGAÑO A LA CLASE TRABAJADOR​A

porcesarhernando.bustamante@gmail.com el 07-10-201208:30 AM / TOMADO DE LA REVISTA SEMANA

La reforma tributaria trae una modificación que repite el engaño en que se ha venido incurriendo en la última década con las políticas de flexibilización laboral, que presupone que cuando se le rebajan al empresario las cargas tributarias o los gastos, las mismas se traducen en más empleo.

Cuando se produjo la reforma a las horas extras en el congreso Piedad Córdoba se opuso vehementemente sobre la base de que al final el trabajador terminaría sin horas extras y el empresario no haría nada por incrementar el empleo. Así fue. La clase trabajadora ha venido perdiendo en los últimos diez años lo que ganó en cien años de luchas laborales.

Hoy son contratados a través de terceros, las famosas cooperativas, se les ha cercenado en la mayoría de los derechos, se volvieron corrientes los contratos que no contemplan el mínimo de garantías laborales. El economista Eduardo Sarmiento lo sintetiza magistralmente:

“El expediente es de la misma familia de la flexibilización laboral que presume que el desempleo se origina en rigideces laborales y, en consecuencia, se corrige bajando los salarios. En aras de esas doctrinas se recortaron las compensaciones por horas extras y dominicales, se crearon las cooperativas de trabajadores, se ajustó el salario mínimo por debajo de la productividad y se incrementó la tributación indirecta.”

Donde están los sindicatos, los congresistas que dicen proteger a la clase trabajadora, que pasó con las centrales obreras. Señores, alguien tiene que oponerse a este esperpento.

El presidente, que siempre dice reconocer sus errores debería revisar este punto. Señores asalariados, sino reaccionan, volverán a favorecer al empresario en detrimento de sus derechos, se ha vuelto costumbre en este país.

martes, 9 de octubre de 2012

Una sociedad enferma.

Es muy triste tener que admitirlo, pero ya no hay discusión posible. Se podrá poner en duda el tipo de enfermedad que padece la sociedad o en el grado de la misma, pero de que está enferma, no hay duda posible.

Una sociedad donde solo interesa lo material, el “tanto tienes, tanto vales”, el “aparentar” más que el “ser”, el “tener más que el vecino”, el egoísmo, lo soez, la falta de respeto, la blasfemia a todas horas, el culto al cuerpo y el olvido más absoluto del espíritu, el botellón, la droga, la violencia y el desorden, una sociedad, en definitiva, cuyo único dios es el viejo conocido “becerro de oro”, es que está muy enferma. Casi terminal.
Una sociedad en donde se aspira a vivir eternamente, cuanto más guapos y más delgaditos mejor, claro, para no pensar que tenemos que morir alguna vez y rendir cuentas, porque es una ordinariez recordarlo y de mal gusto, es una sociedad podrida y acabada.

Vivimos en la “cultura del ocio”, en la “sociedad de consumo” por excelencia, en la “sociedad del bienestar”, en la “tolerancia”, en lo “políticamente correcto”, en la igualdad (por abajo, muy abajo) de los desiguales, en la “alianza de civilizaciones”, en el “mundo sin fronteras”, en la “cultura de lo multirracial”, en… ¿Para qué seguir?
Lo más elevado, lo espiritual, lo que alimenta al alma, la tradición, la verdadera Historia, el patriotismo, la Religión, todo lo más noble y eterno es relegado, perseguido y censurado. No debe sentirse nada ni por Dios, expulsado de la vida diaria, ni por la Patria, ni por la Familia, ni por la Bandera, ni por la Justicia.

Todo eso son cosas pasadas de moda, cosas de fachas, que no dan ni prestigio, ni dinero, ni muchísimo menos votos, faltaría más…
Y una sociedad así no puede seguir viviendo mucho tiempo. Esa enfermedad la irá corroyendo por dentro hasta que muera. Y lo hará, tarde o temprano, si no se pone remedio y se intenta una “terapia de choque” que la pueda sanar. Habrá que intentar evitar la nueva “invasión de los bárbaros” que dé por tierra con todo y acabe con lo malo que nos domina y no curamos, pero también con todo lo bueno que, alguna vez, tuvimos y no supimos conservar.

En eso estamos. Cuando hay un tumor maligno hay que extirparlo y tomar medidas de choque para evitar la metástasis y el final. Lo malo es que no tenemos un solo tumor, sino muchos.
Pedimos a Dios por el enfermo y porque nos mande un buen médico que lo sane urgentemente. Aunque haya que aplicar el escalpelo y cortar por lo sano.

“A grandes males, grandes remedios”… Y ya se sabe: “el que mucho ríe al final llora”… cuando ya no hay solución.1
 

lunes, 8 de octubre de 2012

¿HACIA UNA NUEVA CONSTITUYENTE?

Luis Pérez Gutiérrez
El Proceso de Paz necesita miradas de futuro para que evitar sobresaltos sociales. Si el acuerdo fracaso, será una frustración de consecuencias políticas imprevisibles. Si el acuerdo del gobierno con las FARC es exitoso como desea Colombia, vienen cambios profundos. Me aventuro a señalar que si hay acuerdo de paz habrá elecciones para una Nueva Constituyente, no la de Uribe sino una Constituyente de Paz.
El M19, hijo de las FARC, era un movimiento guerrillero joven que nació en 1974 y exigió la Constituyente de 1991 a cambio de un acuerdo de Paz. Las Farc, el más antiguo movimiento guerrillero de America latina y quizás del mundo, no tendría pretensiones menores a las del M19.
De un lado, Las farc se proponen perdurar como fuerza política civilista y de avanzada. Sería una frustración para ellos sobrevivir casi 60 años en la lucha armada y no ser capaces de sobrevivir con dignidad en la civilidad. Una Constituyente les permitiría dejar en la historia de Colombia los propósitos sociales por los cuales han luchado. Y deben buscar garantías burocráticas que le ayuden a perdurar como fuerza política y no a desaparecer en uno o dos años. Las Farc buscarán alternativas dignas para sus miembros. Si no es asi, caería en el peligro de una diáspora de bandas delincuenciales que aterrorizarían al país.
Y de otro lado, en principio se comenta que las Farc aspiran a que no sean extraditados por narcotráfico ni llamados por CPI por delitos de lessa humanidad ni por el reclutamiento de miles de menores para la guerra. Estas excepciones las puede hacer solo un Constituyente primario. No son decisiones naturales ni del Presidente Santos ni del Congreso por las consecuencias futuras que cargarían a sus espaldas.
Y si se convoca la Constituyente el país será distinto. Elecciones inmediatas para constituyente con disolución del Congreso. Y Una Nueva Constituyente tendría propósitos precisos. El primero es que las Farc desearan construir una plataforma política y burocrática capaz de consolidar un partido político con opciones de ganar el poder.. Y lo primero que pedirían en una Constituyente sería convocar a elecciones inmediatas de Concejales, Diputados, Alcaldes, Gobernadores, y Congresistas.
Las Farc buscan vigencia política y que sus miembros y seguidores tengan poder y puestos de qué vivir, en qué laborar y cómo influir en la opinión pública. Y la burocracia estatal es la primera alternativa de supervivencia y asi lo han demostrado todas las desmovilizaciones de Colombia. Desde la politología, podría predecirse que las Farc ganarían entre 200 a 300 alcaldías, por lo menos 4 o 5 gobernaciones, más de 2.000 concejales, cerca de 200 diputados, y por lo menos 20 congresistas. Es decir, cerca del 20% de los elegidos provendrían de las farc. Eso les daría vitalidad como fuerza política influyente en la vida del país y oxigeno para ubicar sus fuerzas y seguidores.
Los Colombianos no solo tenemos que prepararnos para firmar la paz, sino también para grandes cambios no imaginados.

Colombia es el país con más desplazados internos en el mundo

Una de cada 97 personas en el mundo, o lo que es lo mismo, el 1 por ciento de la población mundial, se ha visto obligada a abandonar ...