jueves, 30 de septiembre de 2010

A calzón caído


Elbacé Restrepo | Medellín | Publicado el 5 de septiembre de 2010/ PERIODICO EL COLOMBIANO.

Que la descomposición social dio punto, es un lamento generalizado en las esquinas, en el supermercado, en el radio que acompaña en la cocina.

Todos sentimos que los jóvenes perdieron el rumbo; que ya no existen los principios elementales de convivencia; que desaparecieron también los valores humanos, que nos llevó el patas y nos dejó caer?

Bueno, sí, es cierto, pero, ¿qué estamos haciendo para solucionar todo eso? ¡Nada! Porque estamos convencidos de que son los demás quienes tienen esa deuda social pendiente, "olvidando que somos los demás de los demás, nos hacemos los sordos cuando llaman los demás?" (de una canción de Alberto Cortez).

El Estado, el sistema educativo, el gobierno, la religión, Pablo Escobar, en fin, cualquier cosa distinta a nosotros mismos, siempre es el blanco perfecto del dedo acusador cuando de señalar culpables se trata. Nada más fácil que esquivar las propias responsabilidades.

Los que pertenecemos a generaciones anteriores sabemos que el cambio ha sido brusco. Los jóvenes de hoy tienen mucha más "libertad", mal entendida, por cierto, pero les sobra soledad. Cualquiera que tenga mínimo cuarenta almanaques encima coincidirá conmigo en que la nuestra fue una época término medio, o sea, ni tan tan, ni muy muy. Teníamos una especie de autonomía con responsabilidad que nos forjó en templanza a la gran mayoría.

No era obligación encerrarnos a las 9, pero sí a las 10. Había que pedir permiso para todo y someterse a un interrogatorio: ¿Una finca? ¿Y de quién? ¿Y a qué se dedica el señor? ¿Y qué apellido es? ¿Y quiénes van? ¿Y van los papás o algún adulto? ¿Y cuándo vuelven? ¿Y hay teléfono? Para recibir, después de todo, un lacónico no como respuesta. "Y no es no". No valían ruegos, llantos ni pataletas. Era palabra de mamá o de papá. O sea, última palabra y punto. ¡Apelación a los infiernos!

Interactuábamos con gente, no pantallas. Éramos sensibles al dolor y a la alegría, oíamos, nos oían y nos descubríamos en las miradas de los otros. Los principios no se negociaban y los roles estaban definidos. El papá y la mamá ordenaban y los hijos obedecían. Ahora no hay papá, no hay mamá o hay una revoltura tenaz por aquello de los míos, los tuyos y los nuestros. Y todos deciden, menos los adultos, porque no se puede atentar contra el "desarrollo de la libre personalidad", cuyos beneficiados recitan tan fácil como Rin Rin Renacuajo.

Hoy una nalgada es la vía más rápida para llegar a una demanda, aunque todos sabemos que, sin humillar y sin causar lesiones graves, hay "pelas" que hacen falta.

Si los papás retomáramos la autoridad, con amor y con diálogo, otro gallo cantaría.

Pero hemos perdido firmeza y respeto frente a los hijos. Somos permisivos y enterramos la cabeza, como el avestruz, porque les tenemos miedo, porque son casi unos desconocidos que viven en la misma casa. Los tenemos, les damos comida, ropa y estudio, si acaso, pero no más. De ahí para allá, ¡defiéndase como pueda, mijito!

Por eso hay que mirar de puertas para dentro cada vez que el dedo esté dispuesto a señalar culpables, porque muchos de los problemas sociales que hoy nos aquejan, empezaron el día que los papás perdimos la correa y se nos cayeron los calzones. Desde entonces nos fregamos, más de lo que estábamos.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Un ciudadano capaz es lo que debe escoger el pueblo para que lo gobierne.

Opinión libre 109
Por: Diego Roldán Jaramillo

Si bien es cierto que el candidato de hoy, debe ser proactivo, al mismo tiempo tiene que tener predisposición de trabajar en equipo, pero no basta confiar en los asesores de confianza y funcionarios para solucionar áreas específicas, porque el gobernante nunca debe depender en un cien por ciento de ellos. La realidad nos muestra que los funcionarios de confianza muchas veces hacen abuso de confianza o asesoran mal, llegando en la mayoría de los casos, a corromper o ser corrompidos.

Para encargar a un profesional en un cargo de confianza el funcionario elegido debe hacer un examen sobre sus competencias que tenga del manejo de la cosa pública.

No basta tener buenas intenciones para solucionar los problemas que nos aquejan y querer poner orden con entusiasmo y buena voluntad, es necesario estar preparado para elaborar un plan de gobierno integral, ya sea a nivel local, regional o nacional, basado en los problemas neurálgicos a solucionar y sobre todo estar consciente que ese plan propuesto puede funcionar en la teoría y saber que en la realidad la coyuntura se puede tornar diferente, es allí, en esos momentos en los que se tiene que reaccionar con la suficiente capacidad de análisis y reflexión para tomar decisiones en base a su propio análisis y la de los funcionarios responsables.

Un buen candidato, es aquel que está dispuesto en primer lugar a servir a los electores, quienes lo eligieron y no a servirse de ellos. Es la persona que llega a ocupar un cargo público, ya sea de Presidente de la República, gobernador, Congresista, Alcalde, diputado, concejal, edil, junta de acción comunal, personería de su colegio, o en el concejo municipal de la juventud, tiene que tener la suficiente capacidad de desprendimiento y sobre todo del ego personal, porque en vez que el gobernante de turno este encima del pueblo para mandar y ordenar, éste debe estar debajo del pueblo quién lo eligió para solucionar los problemas demandados por ellos, con capacidad de gestión pública y suficiente preparación en cuanto al derecho constitucional, administrativo, y sobre todo conocimiento de licitaciones públicas.

El candidato que solo piensa llegar al poder para solucionar sus problemas económicos, pone en grave riesgo el desarrollo y progreso de un pueblo y por ende, pierde la oportunidad que le dio la vida, de hacer algo por los demás.

Los seres humanos somos imperfectos y cometemos errores, pero no hay que escudarse en ese argumento de la realidad, puesto que somos seres perfectibles, y de lo que se trata, es que, si lo hubo, asuman sus errores públicamente y sobre todo de asumirlo personalmente, para lograr un sincero arrepentimiento, el cual de seguro evitará que esos errores se repitan.
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Ñapa: Informe del DNP de los resultados del desempeño fiscal de municipios del año 2008 y 2009 Avance en la gestión fiscal de los actuales mandatarios.

Según el informe del DNP de los resultados del desempeño fiscal del año 2008 y 2009 de los municipios, según los criterios de evaluación establecidos por la Dirección de Desarrollo Territorial Sostenible del DNP. Yarumal esta asi:

YARUMAL EN EL AÑO 2008 ESTABA EN EL PUESTO 280 A NIVEL NACIONAL, Y EN EL DEPARTAMENTAL ESTABA EN EL PUESTO 32

YARUMAL EN EL AÑO 2009 QUEDO EN EL PUESTO 524 A NIVEL NACIONAL, Y EN EL PUESTO DEPARTAMENTAL QUEDO EN EL PUESTO 52

HOY YARUMAL EN GESTION A NIVEL NACIONAL PERDIO 244 PUESTOS, Y A NIVEL DEPARTAMENTAL PERDIO 20 PUESTOS.

martes, 28 de septiembre de 2010

EL DINERO PUBLICO ESTA ACEITANDO LA VIOLENCIA


Luis Pérez Gutiérrez

En 2003, la desmovilización de los 913 combatientes del Bloque Cacique Nutibara, se hizo con tres exigencias de parte de la alcaldía de ese entonces:

Una. Que los desmovilizados trabajaran de tiempo completo en labores que la Alcaldía les definiera en actividades públicas. Dos. Que estudiaran los sábados Y tres. Que se presentaran a una inspección municipal los domingos para reportar sus actividades de la semana

El propósito era mantenerlos ocupados en la legalidad, reeducarlos y hacerles sano seguimiento para que se transformaran en ciudadanos de bien.

La Alcaldía siguiente, en 2004, de buena fe, de común acuerdo con líderes de desmovilizados, como Don Berna y Job, decidieron cambiar el empleo por un auxilio mensual de $400.000 sin que tuvieran que trabajar. Y el gobierno nacional aceptó cofinanciar ese regalo. Y a partir de 2004 Medellín se llenó de desmovilizados para recibir dinero público mensual regalado: Llegaron cerca de 4.300. Este regalo de $400.000 no tenía fin, era mensual por siempre.

De una manera oculta pero pública, los desmovilizados se empezaron a dedicar a actividades non sanctas. Unos a la droga, otros a bandas y combos, y otros a la extorsión. En 2009, expertos en violencia urbana y, aún, el líder nacional de los desmovilizados, aseguraron que el 70% de los desmovilizados estaban delinquiendo y al mismo tiempo recibiendo dinero público regalado.

Paralelamente, la nueva Alcaldia de Medellin en 2008, creó el programa Jóvenes en Riesgo y a cada persona que entregaba un arma ilegal le asignaban un regalo mensual de $400.000 pesos sin limite de tiempo. Y asi, con dinero público se pagaba un ejército de jóvenes en riesgo de cerca de 1.200 personas.

Pero también, en 2009, se descubrió que gran parte de los de Jóvenes en Riesgo seguían delinquiendo y con el dinero público sagrado y regalado modernizaron las armas y los combos. (ver El Mundo)

Durante seis años, la Alcaldia de Medellin llegó a tener un ejército de 5.500 militantes pagados con dineros públicos, pero la mayoría delinquiendo. Más de $25.000 millones al año de dinero público se regalaba, sin darse cuenta, que era para aceitar la violencia.

Ante este escándalo, la Alcaldía hizo bien en 2009 en acabar el programa que le regalaba a los 4.200 desmovilizados una suma mensual de $400.000 y en acabar Jóvenes en Riesgo.

Pero de nuevo, en 2009, La Alcaldía de Medellín volvió a caer en la tentación de regalar $400.000 mensuales a otros 1.200 jóvenes, y creó el programa nuevo Fuerza Joven.

Y hoy de nuevo, expertos urbanos y vigilantes del proceso, en informes documentados, vuelven a asegurar que gran parte de quienes están recibiendo $400.000 mensuales regalados por parte de la alcaldía en Fuerza Joven, sigue delinquiendo.

La Alcaldia de Medellin tiene que entender que lleva 7 años aceitando la violencia con el dinero público. Ante el fracaso de regalar dinero a ilegales hipócritamente arrepentidos, la Alcaldía no puede perpetuar la idea fracasada de botar el dinero público en ilegales. La Ciudad no aguanta más violentos.

El Dinero público está sirviendo para perpetuar la violencia en la ciudad. La mejor manera de corregir una persona con inclinación a lo bélico o a lo ilegal es ponerlo a trabajar en la legalidad, mantenerlo ocupado en actividades dignas, educarlo, hacerle seguimiento. Es urgente cambiar la fracasada estrategia de dinero público regalado por empleos dignos y legales, para desmovilizados y jóvenes en riesgo.

En lugar de regalar dinero para aceitar la guerra, hay que pagar un salario digno para la paz. Empleos en mantenimiento de escenarios deportivos, o de obras públicas, o de colegios; o para Que trabajen en actividades ambientales en quebradas y espacios públicos. O para Que laboren en separación de residuos solidos. O muchos más.

Un aporte inmediato a la pacificación de la ciudad es no regalar más dinero público a ilegales hipócritamente convertidos.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Soledad, neblina y bala, dura noche en Yarumal


CRUENTO ENFRENTAMIENTO entre las bandas Los Rastrojos y Los Paisas ha dejado este año una elevada cifra de 68 homicidios en esta localidad. Panfletos y amenazas crean zozobra y tensión entre la población.

Gustavo Ospina Zapata | Yarumal, enviado especial el Colombiano | Publicado el 26 de septiembre de 2010

Julio César Herrera | A pesar de corazón perdonó al asesino de su hijito de 15 años, doña María Celina no borra a su niño del recuerdo. Lo llora cada día.

Desde hace casi cinco meses, doña María Celina Eusse no ha parado su llanto. En las noches frías de Yarumal, su soledad se ensancha y entonces dos recuerdos se le incrustan en el alma y no la dejan dormir: el de su esposo fallecido el pasado 3 de mayo y el de su hijo de 15 años, a quien la noche del 5 de junio le clavaron una puñalada en el pecho y duró veinticinco minutos desangrándose sin que nadie lo auxiliara.

Cosas tan crueles no pasaban en su pueblo años atrás, pero la violencia empezó a aflorar, los disparos a sonar en las noches y luego también en las mañanas y tardes.

Había nervios de ciudadana, bendiciones cada noche para que nada grave pasara y de pronto la cosa se calmara, pero doña Celina nunca pensó que esa violencia iba a tocar su casa.

Y menos que una víctima fatal iba a ser su hijo, un joven con ganas de retomar sus estudios, los cuales había dejado por estar viajando a Medellín a acompañar a su padre, que estuvo interno en un hospital aquejado de una enfermedad que lo mató.

"Él ya estaba matriculado en un colegio y también iba a vender mercancías en moto, era el que me ayudaba después de que murió mi esposo", relató Celina con la foto de su hijo entre sus manos. ¿Cuál fue su pecado?

Supone su madre que haberse ennoviado con una jovencita que había sido novia de un joven perteneciente a una banda. Añade su hermana que días antes el supuesto criminal había estado rondando la casa armado con machete. El sábado 5 de junio el destino marcó la suerte fatal del muchacho.

"Él estaba acá, pero un amigo lo invitó a dar una vuelta y se fueron. En un momento mi niño se vio solo en la calle y el otro lo apuñaló".

Las lágrimas bajan por su rostro triste, sobre todo al recordar que su hijo se desangró y nadie acudió en su ayuda. Sostiene que su otra hija, que estaba con él, gritaba, pero nadie atendió sus llamados, "murió sin atención, cuando lo llevaron al hospital, llegó muerto".

En su noble corazón, ella no clama venganza sino justicia, "le pido a Dios por ese muchacho que me lo mató, ojalá le llegue el arrepentimiento, mi hijo era un niño bueno, mi mano derecha".

Crímenes, panfletos

Si no fuera por el contexto en que se da, la muerte de este joven sería una más de las tantas que se suceden a diario en Colombia. Por años, Yarumal ha sido tranquilo, calmado, pacífico. Y alegre.

Pero este año el ambiente cambió. Tanto, que en las cuentas del secretario de Gobierno, Pablo Ramírez, hasta el lunes pasado iban 52 asesinatos este año. Otro ciudadano, sin embargo, tiene el registro de 70.

Dice que su lista la ha cotejado con Medicina Legal y con las familias de las víctimas. Esta semana, en un Consejo de Seguridad, Medicina Legal reveló que van 68 homicidios, muchos para un pueblo de 50 mil habitantes.

La granada lanzada el sábado 18 contra una discoteca y que causó la muerte del joven Marco Henao Betancur y heridas a 14 personas, no fue algo aislado. El ataque estuvo precedido de un panfleto que días antes anunciaba un "sábado negro" en Yarumal.

Antes, otros dos pasquines también habían causado zozobra porque ambos contenían amenazas. En uno se trató de amedrentar a drogadictos, prostitutas y a la comunidad gay bajo el membrete "llegó la hora de la limpieza social" . Y el otro circuló con la firma de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia. Anunciaba guerra contra las bandas Los Paisas y Los Rastrojos, que desde inicios de este año tomaron asiento en Yarumal, en donde protagonizan una lucha territorial por las plazas de vicio, el microtráfico y las extorsiones. Es lo que tiene disparados los homicidios.

Las víctimas están, la mayoría, en el pabellón San Bartolomé del cementerio local. Allí se ven juntas las bóvedas de los hermanos Sergio Alejandro y Andrés David Areiza Parra, asesinados el 28 de agosto (el mes más violento, con 15 crímenes). Están las fosas de los esposos Abel Yepes y Luz Dary Ramírez, ultimados en el corregimiento Ochalí el 19 de julio. Sobresalen, con cintas rojas, las tumbas de Cruz Elena Rojo Peña y Nevis Yuleni Roldán, una pareja de mujeres asesinada el 27.

Una muerte que causó conmoción fue de la del joven Eider Alfredo Gómez Orrego, de 16 años, a quien el sicario -que fue capturado- confundió con otra persona y lo acribilló en plena vía. En la losa de su tumba se ven sus fotos con los compañeros y compañeras de colegio, en las que reía con esa alegría que irradian los muchachos cuando llevan una vida tranquila, sin agites.

"Acá eso no vale, esto está como las comunas de Medellín, hay zonas con fronteras, barrios como San Carlos, Mediaguas, Cuatro Esquinas, Santa Matilde, El Señor Caído y San José, donde Los Rastrojos y Los Paisas imponen su dominio con intimidaciones y fronteras invisibles", señala un habitante.

Para proteger a adolescentes y niños, el Concejo, mediante acuerdo, impuso el toque de queda desde el 5 septiembre entre las 10:00 p.m. y las 5:00 de la mañana, aunque los mismos jóvenes se encierran más temprano.

"A mí ya no me dejan salir después de las 7:00", confiesa un niño de 11 años vestido de colegial. Este año van cuatro taxistas asesinados.

El padre Carlos Mario Zapata invita a los jóvenes a retomar la senda del bien. Aboga porque haya más respeto por la vida.

En Yarumal, punto estratégico entre Medellín y el Bajo Cauca, hay miedo y crímenes. El miércoles circuló el rumor de otra amenaza que hizo encerrar al pueblo desde las 5:00 de la tarde.

"Los negocios se están quebrando", afirma un ciudadano. Las almas también, pero de tanto llanto. Hay que parar la ronda de muerte.
» Contexto

Las autoridades

Hay medidas y otras opciones
El secretario de Gobierno, Pablo Ramírez, admite que la tranquilidad de Yarumal está alterada por la presencia de las bandas criminales, pero comentó que se han tomado medidas para contrarrestar la violencia. "Se triplicó el número de policías, hacemos reuniones de seguridad tres veces por semana con jueces y fiscales procurando un engranaje de todas las entidades, con Policía, Ejército y Fiscalía". El funcionario afirmó que que en septiembre se ha logrado reducir el índice de asesinatos -hasta el pasado viernes iban 5-.

Aunque admitió la existencia de panfletos, aún no los relacionó con los crímenes. Y destacó que la Administración tiene programas para que la juventud no tome la senda de la violencia, "tenemos más de 8 mil deportistas subsidiados, una Casa de la Juventud que visitan más de 350 jóvenes al día, la Escuela de Padres funciona y se avanza en la prevención a la drogadicción y prostitución".

El Ejército les ha propinado golpes
Por su parte, el coronel Freddy Marlon Coy, comandante del Batallón Girardot con asiento en la localidad, afirma que las Fuerzas Militares, unidas con la Policía y la Alcaldía, están combatiendo a las bandas.

"Los vándalos acá son pocos, pero una o dos personas tienen capacidad de desestabilizar. Les hemos logrado dar golpes contundentes, estamos arreciando, arreciando y arreciando, como ordena nuestro presidente Santos.

Ya llevamos 69 capturados, hemos destruido laboratorios de coca e incautado cantidades de droga en los carros que viajan a la Costa. Acá la delincuencia no tiene silla, los vamos a desterrar", sentenció el coronel Marlon Coy.

Colombia es el país con más desplazados internos en el mundo

Una de cada 97 personas en el mundo, o lo que es lo mismo, el 1 por ciento de la población mundial, se ha visto obligada a abandonar ...